sábado, 12 de septiembre de 2015

No quiero enamorarme, yo quiero amar…

Estoy de nuevo en cero, mi corazón está en números rojos, un poco desgastado y sin ilusión. Deseo que vuelva a ser ocupado, pero no de una manera fugaz sino de una forma única, que sea permanentemente.

No deseo entusiasmarme, sólo quiero amar…

Hay quienes dicen que el que ama sufre y que el amar te duele, tal vez duele, pero qué maravilloso es cuando amar te provoca ser mejor persona, cuando irrumpe tu sueño, cuando estás decaído y ese mismo amor te hace seguir en lucha. No le temo al amor, ni a la cuestión de amar, le temo sólo enamorarme y a los 2 o 3 años ese amor se esfume o peor aun, que nunca haya sido amor.

Después del todo el corazón se repone, nunca se queda vacío del todo, siempre alberga amor, porque ese amor se alimenta de la esperanza y la esperanza es la última en perderse.

El corazón no sólo tiene la función de bombear sangre, también ama y también se hiere… Yo no quiero emocionarme con unos cuantos besos, no quiero saborear las mieles del romance, ni los deseos de una habitación, yo deseo amar con certeza, con fuerza y convicción, deseo amar de una forma cruda y honesta, aun sabiendo que amar es mucho más que ver un héroe, es ver a un hombre fuerte también derrumbarse, ver un hombre con miedos, pero aun así que se la juegue aventándose al ruedo.

El AMOR es una rara flor que no siempre florece. Sólo sucede cuando no hay miedo, nunca puede suceder antes. Y con esto no solamente estamos hablando del amor de pareja. Estamos hablando de cualquier clase de amor, estamos hablando de las relaciones, de los contactos, de que las cosas salgan bien, y salen bien a partir del amor.

Cuando una pareja tiene miedo, aquello no es amor, es sólo un acuerdo entre dos personas temerosas que dependen el uno del otro… Luchando, peleando, explotándose, manipulándose, controlándose, dominándose, poseyéndose, teniendo sexo… Pero no es amor.

“Para lograr el AMOR debes ABANDONAR EL MIEDO. Y si tienes tanto miedo es porque no puedes ver que

AMANDO NO TENEMOS NADA QUE PERDER.  No hay nada qué temer, nada qué perder, no hay nadie en contra tuya, aun cuando lo sientas,

porque todo, absolutamente todo, está en nosotros.

– Marilo garrido

No quiero esta vez enamorarme más… Quiero amar y lo quiero hacer como los valientes, como los ciegos, como si fuera la primera vez, como si nunca nadie me hubiera herido, como si jamás hubiera conocido el amor, quiero amar sin reservas, sin barrera alguna, salir del castillo de princesa Odai y ser una reina.

Amarme yo y estar tan llena de ese amor, que se desborde y desee con todas mis fuerzas compartirlo.


Related Posts:

Síguenos En Facebook

Google+

Populares

Con la tecnología de Blogger.
Usamos cookies propias y de terceros para ayudarte en tu navegación. Si continuas navegando consideramos que aceptas el uso de cookies. OK Más información